Historia de la eABG en la obra Colas
En varias obras de Estrasburgo, Colas ha estado probando dos máquinas 100 % eléctricas. La primera es la extendedora eléctrica eABG 4820 del Grupo Ammann, y la segunda es un rodillo tándem, el eARX 26.
La iniciativa de Colas en Estrasburgo tiene como objetivo evaluar las capacidades reales de estas nuevas tecnologías para reducir el impacto de las obras urbanas, donde la contaminación, el ruido y los olores son especialmente importantes.
El prototipo de extendedora eABG 4820 está diseñado para una autonomía teórica de un día completo de trabajo en condiciones normales de funcionamiento. Sin embargo, la construcción de carreteras implica muchas variables, como el espesor de la capa de asfalto, la composición del asfalto y las condiciones meteorológicas. Se espera que esta máquina esté disponible en el mercado a finales de 2025.
En cuanto al rodillo tándem eARX 26 de Ammann, un modelo de producción que ya lleva un año en el mercado, su diseño probado garantiza el mismo rendimiento que su homólogo convencional de combustible. El eARX 26-2, de 2,6 toneladas y 1,2 metros de ancho, está diseñado específicamente para funcionar con electricidad, y solo su sistema de dirección sigue siendo hidráulico.
Dos grandes motores eléctricos, situados a ambos lados del tambor, impulsan tanto el movimiento como la vibración. Cuando el rodillo se detiene o se desactiva la vibración, se activa un sistema de recuperación de energía. En estos casos, los motores eléctricos siguen generando energía, que se envía al paquete de baterías para prolongar su autonomía. El paquete de baterías de 31,5 kWh se puede recargar mediante el cargador integrado (50 A) en 12 horas o con un cargador externo (200 A) en 3,5 horas. El sistema de vibración multifrecuencia, que oscila entre 55 y 66 Hz, proporciona una fuerza de compactación de 29 a 41 kN. El uso de un bajo voltaje de 48 voltios minimiza el riesgo de lesiones durante el funcionamiento y el mantenimiento.
Para garantizar un manejo óptimo y evitar cualquier riesgo de daños o errores operativos, es obligatorio realizar una formación específica del equipo antes del primer uso de estas máquinas eléctricas.
Un doble beneficio medioambiental y social
El despliegue de estas máquinas eléctricas se inscribe plenamente en las estrategias de transición energética e innovación de Colas y ABG by Ammann Group. Al reducir significativamente las emisiones de CO₂ , estas máquinas contribuyen activamente a los objetivos de neutralidad de carbono del grupo. Además, su uso ayuda a limitar la contaminación acústica, un factor esencial para mejorar las condiciones de trabajo de los equipos y la calidad de vida de los residentes, especialmente en zonas urbanas densamente pobladas.
«Estamos comprometidos con replantearnos nuestros métodos para reducir la huella de carbono de nuestras obras, al tiempo que mejoramos el confort de nuestros equipos y de los residentes locales. La implantación de estas máquinas eléctricas es un paso clave hacia un modelo más sostenible, en el que la reducción de las emisiones de CO₂ y de la contaminación acústica se convierte en una prioridad. Probar estas máquinas en condiciones reales nos permite validar su eficacia y plantearnos su futura implantación a gran escala», explica Karen Boniface, responsable de rendimiento energético de Colas Nord-Est.
«Esta colaboración con Colas nos brinda una valiosa oportunidad para probar nuestro prototipo en condiciones diversas y exigentes. A través de estas pruebas en el mundo real, estamos perfeccionando nuestras tecnologías para garantizar un rendimiento óptimo y facilitar su adopción por parte de los equipos sobre el terreno», afirma Judith Ronden, directora de cuentas clave de ABG by Ammann Group.