AFW 150-2
RAH100 TAMBOR DE RECICLAJE
ARW 65
sistema de control as1
AMMANN SERVICELINK
Concepto sin eje trasero
Sistema inteligente de restablecimiento de tracción de la máquina
AMMANN COMPACTION EXPERT
Elevación de la cabina en los rodillos tándem
Controles remotos infrarrojos
Quemador de aserrín de madera en plantas mezcladoras de asfalto
Reducción de vibraciones no deseadas
Sistema de excitación de triple eje
Plantas mezcladoras de hormigón optimizadas para transporte
Plantas de hormigón permanente con versiones de elevador o cinta transportadora
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La historia de Ammann está marcada por la innovación. Lo prueban las docenas de patentes que la compañía ha obtenido durante sus 150 años de existencia.

La búsqueda de la innovación ya estaba en marcha en 1908 cuando Ammann obtuvo una patente para una máquina de macadán: básicamente, una combinación de planta mezcladora de asfalto y pavimentadora. La máquina empleó una tecnología revolucionaria para esa época para eliminar los peligros emergentes para la salud: la polvareda que levantaban los automóviles.

El progreso de hoy se basa de manera sólida en ese cimiento, establecido hace décadas. La tecnología se desarrolla y mejora continuamente para producir las máquinas, las plantas y los servicios que ayudan a los clientes a encontrar soluciones a los desafíos de todos los días.

En el mundo actual, dichas soluciones implican cada vez más la sustentabilidad para proteger a nuestro planeta y sus recursos para las generaciones futuras. Los equipos de compactación fueron construidos para alcanzar su objetivo con la menor cantidad de pasadas y, de esta manera, reducir el gasto de combustible y el desgaste de la máquina. Las pavimentadoras son automatizadas para optimizar el uso de los materiales. Las plantas de mezcla de asfalto y cemento de Ammann utilizan tecnología que permite una producción con porcentajes extremadamente elevados de materiales reciclados.

¿Qué camino seguirá Ammann en los próximos 150 años? Para obtener esa respuesta, solo debe mirar nuestra historia de creación de productos innovadores que ayudan a los clientes y, a la vez, protegen el mundo a nuestro alrededor.

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La industria de la pavimentación a menudo se centra en los trabajos más grandes. Los aeropuertos y las súper carreteras y los amplios ascensores que requieren parecen llamar toda la atención.

Pero ¿qué pasa con los trabajos más pequeños, como pavimentar carriles para bicicletas y rellenar zanjas donde se han colocado líneas eléctricas?

El enfoque tradicional en estos sitios de trabajo ha sido colocar la mezcla asfáltica a mano. Esto requiere mucho tiempo y es un trabajo difícil, y la calidad del producto final no se puede comparar con las superficies lisas y precompactadas que puede proporcionar una pavimentadora.

Ammann conquistó este desafío con la introducción de la Mini pavimentadora AFW 150-2. La máquina llegó al mercado en 2009 y se la reintrodujo el año pasado, manteniendo el diseño y el concepto, pero incorporando nuevas tecnologías.

La AFW 150-2 es una máquina verdaderamente única en el mercado, con una capacidad para pavimentar tan estrecha como 250 mm. La máquina es ideal para aplicaciones tales como trabajos de servicios públicos, carriles para bicicletas, aceras y pasillos de jardín. Puede pavimentar hasta 1650 mm de ancho, cuando se necesitan elevaciones más anchas.

La AFW 150-2 es una pavimentadora de tres ruedas: dos en la parte trasera para permitir la tracción y una en la parte delantera para la dirección. Puede ser operada por un solo operador y dejará una superficie nivelada y precompactada que no se podría conseguir a mano.

¿Qué pasa con la productividad? Los equipos que usan la pavimentadora dicen que es más del doble de rápido que completar el trabajo a mano.

Siempre habrá necesidad de pavimentadoras que puedan trabajar en anchos extendidos. Pero la AFW 150-2 ayuda a las cuadrillas a tener éxito y a obtener ganancias, al mismo tiempo que hace trabajos más pequeños.

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El equipo de Ammann se reunió en Bauma 2007 en Munich con un nuevo producto que sorprendió a la industria de la construcción de carreteras: la secadora RAH100.

La RAH100 no era la renovación de un producto ya existente. Era mucho más que eso. La secadora ofrece la capacidad de utilizar el 100 por ciento de asfalto reciclado, un beneficio que la competición no pudo igualar.

El equipo de Ammann desarrolló la secadora a través de una combinación de pensamiento creativo y excelencia tecnológica.

Cuando se usa RAP, se debe tener en cuenta la temperatura, dado que debe alcanzar entre 120°C y 130°C. Las complicaciones surgen debido a las temperaturas. El RAP debe llegar a su temperatura objetivo; sin embargo, no puede superarla demasiado.

Finalmente, el equipo descubrió una solución para crear un proceso de contraflujo del secado en el que el RAP puede “salir antes”. La RAH100 consiste en dos secciones conectadas. Una es en una cámara de combustión estática que tiene un quemador e impulsa el aire hacia la segunda sección, una secadora de contraflujo.

El RAP ingresa al extremo lejano de la sección de esta secadora y se dirige a la cámara de calor. No obstante, sale de la secadora antes de ingresar a la cámara de calor, por lo que nunca llega a alcanzar una temperatura que dañe el bitumen.

“Ese porcentaje de 100 por ciento de utilización representó un hito, y Ammann fue el primero del sector en llevarlo a cabo”, comentó Peter Maurer, gerente global de Plantas de Asfalto de Ammann. “Desde entonces, ha sido nuestra marca distintiva. La competencia trata de alcanzarnos, pero seguimos haciendo mejoras sobre el producto creado. Estamos seguros de nuestro posicionamiento en el mercado”.

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Los requisitos para compactar el suelo son sustancialmente diferentes de los requisitos para compactar el asfalto. Esas necesidades diferentes implicaban la necesidad de que los equipos especificados para ambas aplicaciones debían llevarse a muchos lugares de trabajo. Luego vino el rodillo compactador manual ARW 65 de Ammann con características que permitían que una sola máquina manejara ambas aplicaciones.

La clave fue crear una máquina que ofreciera dos amplitudes, una para el suelo y otra para el asfalto. Antes, los rodillos tenían un solo ajuste. Los contratistas tenían que elegir dos máquinas, cada una con una amplitud diferente, para lograr una compactación adecuada en diferentes superficies. Con el ARW 65, la máquina tiene dos configuraciones, por lo que se puede acceder a la amplitud deseada para suelo o asfalto con solo tocar un interruptor.

La compactación de asfalto requiere medidas adicionales, lo que incluye el uso de sistemas de agua para evitar que se peguen. El ARW 65 también incluye un tanque de agua y un rociador preinstalado. El sistema es accesible cuando es necesario, pero no interfiere cuando se trabaja con materiales que no sean asfalto.

Los contratistas se dieron cuenta rápidamente de la eficiencia que proporciona un ARW 65. Hoy en día, las máquinas se encuentran rutinariamente en los lugares de trabajo, listas para ir a trabajar rápidamente, independientemente de la aplicación.

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Ammann ya se había establecido como pionero en los sistemas de control de plantas mezcladoras de asfalto cuando se llevó a cabo Bauma Munich en 1989. Pero en la feria comercial de la industria de la construcción, la empresa dio un paso más con el lanzamiento del primer sistema de control totalmente computarizado.

El sistema, el AS2000, fue revolucionario. Se puso fin a los grandes paneles de control que regían el día. En su lugar, los operadores utilizaron un lápiz sensible a la luz para proporcionar información sobre un monitor CRT. El AS2000 también tenía hardware dedicado con un sistema operativo en tiempo real que podía rastrear todo el proceso en el monitor, una vez más, único en 1989.

En el desarrollo posterior, el as2000plus se introdujo en 1995. Con esta introducción, se podía utiliza hardware estándar, por primera vez. Utilizó un sistema operativo basado en Unix y también marcó la primera vez que se usó un mouse y un tablero estándar para operar una planta. Este sistema de control ofrecía una interfaz de usuario moderna y excelentes funciones de personalización.

Para Bauma Munich en 2004, se introdujo un sistema completamente nuevo: el Sistema de Control as1, que usaba el sistema operativo Microsoft Windows.

El uso de Windows fue significativo porque pudo combinar los datos de la oficina/administración con los de la producción. Se aceleró la transferencia de datos a través del uso de una red, lo que permitió mejorar la eficiencia y tomar decisiones empresariales mejor informadas.

El as1 ha seguido evolucionando. Los módulos que se centran en procesos específicos, como el monitoreo y reciclaje de energía, entre muchos otros, han agregado aún más valor al sistema.

Los últimos esfuerzos incluyen mejoras de interfaz y movimiento hacia una producción más inteligente. Por ejemplo, se lanzó un sistema de bus de campo basado en Ethernet en 2016. Reconoce que los sensores y los actuadores serán cada vez más inteligentes y, por lo tanto, deberán intercambiar más información. El sistema también mejora enormemente las capacidades de diagnóstico remoto.

Continuarán los cambios, lo que incluye el ajuste adicional de la interfaz de usuario y los módulos. Si la historia ha demostrado algo, es que el equipo de sistemas de control de planta en Ammann siempre está buscando formas de mejorar sus ofertas.

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La administración de equipos livianos de compactación en su flota de máquinas tiene sus desafíos.

Muchas empresas poseen una gran cantidad de máquinas. Ese volumen puede dificultar la supervisión de las necesidades de servicio y el estado de la batería. Sin embargo, la falta de actualización en estas áreas puede dañar la vida útil de la máquina y, en el caso de las baterías que no están cargadas adecuadamente, puede ocasionar costosos tiempos de inactividad no planificados.

Ammann reconoció la necesidad de un sistema completo de gestión de flotas livianas de compactación. El resultado es Ammann ServiceLink, una solución digital lanzada en 2016.

Ammann ServiceLink ofrece acceso inmediato a información clave, incluido el estado de la batería y los programas de mantenimiento para herramientas de compactación de mano, como compactadoras de placas vibratorias. Es compatible con todas las máquinas con alimentación por batería de hasta 30 voltios, sin importar la marca de la máquina. Esto permite el seguimiento de la flota sin una herramienta independiente para cada marca.

ServiceLink de Ammann tiene un relé de hardware que puede montarse en cualquier máquina con una batería de hasta 30 voltios. El relé almacena y envía detalles de la máquina, tales como la tensión de la batería, las horas de trabajo y el inicio de la máquina. Información adicional: por ejemplo, los cronogramas de mantenimiento, que pueden almacenarse directamente en el sistema ServiceLink. Se puede acceder a los datos a través de una computadora de escritorio o una aplicación intuitiva.

El sistema de gestión de flotas demostró ser una gran herramienta para casas de alquiler. Puede controlar el uso de la máquina las 24 horas del día, los siete días de la semana, lo que permite hacer el seguimiento a las flotas de alquiler y cobrar por la utilización fuera de horas, como los fines de semana. El sistema de gestión de flota demostró ser una herramienta ideal para las casas de alquiler, ya que a menudo poseen una gran cantidad de equipos livianos de compactación.

Ammann ServiceLink se mejora constantemente y se amplían sus mercados. Se están agregando grandes compactadoras y pavimentadoras al sistema. Pero no es solo para máquinas nuevas. ServiceLink está disponible como modificación para las máquinas más antiguas de Ammann y también para equipos fabricados por otros fabricantes.

Espere aún más de Ammann ServiceLink en el futuro. Las capacidades del sistema se ampliarán para incluir equipos más grandes y una comunicación de bus CAN con respecto a la ubicación, el uso de combustible, los posibles códigos de error y más.

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La mayoría de las compactadoras de suelo tenían un concepto similar, con el motor situado sobre el eje trasero, hasta mediados de la década de 1990, cuando hizo su debut la innovadora máquina sin eje trasero.

La compactadora de Ammann lanzada en este momento parecía diferente porque representaba un concepto de diseño radicalmente mejorado. El equipo de desarrollo de productos de Ammann eligió eliminar el eje trasero. Esto permitió que el motor se ubicara entre las ruedas y mucho más cerca del suelo, lo que, a su vez, creó una gran cantidad de oportunidades.

Para empezar, la visibilidad trasera se mejoró dramáticamente porque el capó del motor no bloqueó la vista del operador. Esto no solo mejoró la seguridad, sino también la comodidad, ya que redujo en gran medida la cantidad de estiramientos y giros requeridos por los operadores.

El centro de gravedad más bajo entregó otro beneficio clave: la estabilidad. Las compactadoras pudieron trabajar en calidades que eran más empinadas de lo que se había considerado con anterioridad.

La ubicación del motor también facilitó el mantenimiento. Su ubicación significaba que se podía acceder a los puntos de servicio desde el suelo, lo que hacía que el mantenimiento fuera más rápido y más seguro, ya que los operadores podían alcanzar los fluidos y los filtros desde el suelo.

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Los rodillos neumáticos están diseñados para manejar configuraciones de diferentes peso, y el Ammann ART 280 no es una excepción.

Es obvio, pero vale la pena señalar que el funcionamiento de una compactadora será diferente según el peso de la máquina. Una máquina pesada será más difícil de detener. Por lo tanto, también se debe reducir su velocidad máxima por razones de seguridad.

Si bien estos factores pueden ser evidentes, los ajustes necesarios pueden ser difíciles de implementar para los operadores, especialmente aquellos sin mucha experiencia.

Esto llevó a Ammann a desarrollar el Sistema inteligente de restablecimiento de tracción de la máquina, que mide automáticamente el peso de una máquina cada vez que se inicia. Si es necesario, el sistema ajusta las configuraciones de los frenos y la velocidad máxima para una seguridad óptima.

Gracias a este innovador sistema, los operadores tienen una mano de ayuda y los sitios de trabajo son más seguros.

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La información confiable puede tener un impacto dramático en los costos del lugar de trabajo. Si un operador sabe que se alcanzan los objetivos de compactación, entonces, puede moverse a una ubicación diferente. Por el contrario, continuar trabajando en superficies compactadas correctamente porque el operador no sabe que se alcanzan los objetivos de compactación es una pérdida de tiempo, combustible y horas de la máquina, lo cual tiene costos. Además, esto puede llevar a la sobre compactación.

Experto de Compactación de Ammann (ACE, por sus siglas en inglés) es un sistema patentado de compactación inteligente que proporciona a los operadores la información esencial necesaria para tomar las decisiones correctas en el sitio de trabajo.

El sistema ACE básico utiliza luces LED para indicar que se está realizando el progreso de compactación. No confirma que se hayan cumplido los objetivos de compactación, solo que se está produciendo la compactación, que es una información extremadamente útil para los operadores.

También se han desarrollado opciones de ACE más sofisticadas. ACEforce mide la compactación y asigna valores específicos al progreso, que se muestran digitalmente. Puede confirmar que se han cumplido los objetivos de compactación. ACEforce también permite el análisis de datos a través del Sistema de Documentación de Ammann (ADS).

ACEpro es el sistema más avanzado. No solo mide el progreso de la compactación y habilita ADS, sino que también permite el ajuste instantáneo y continuo de la amplitud y la frecuencia, ya sea de forma automática o manual.

Sin importar el nivel de sofisticación, todos y cada uno de los sistemas ACE brindan información y eficiencias que hacen una diferencia sustancial en los sitios de trabajo.

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El acceso a componentes clave puede ser difícil en las máquinas de compactación de asfalto grandes o tecnológicamente avanzadas. Los ingenieros de Ammann tuvieron una idea innovadora para resolver este problema a través de un sistema único de elevación de la cabina.

El sistema elevó toda la cabina, específicamente, la inclinó hacia adelante, para mejorar en gran medida el acceso de los técnicos cuando se requiere un mantenimiento difícil o el servicio de la máquina. El equipo de diseño de Ammann también colocó todos los puertos y filtros de mantenimiento principales en ubicaciones de fácil acceso.

Estas innovaciones reducen significativamente el tiempo de mantenimiento, lo que hace que la máquina vuelva a funcionar rápidamente.

Los clientes aprecian mucho los tiempos de mantenimiento más cortos y el fácil acceso para los técnicos.

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Los rodillos compactadores ARR de Ammann proporcionan una gran seguridad en el lugar de trabajo al mantener a los operadores fuera de los espacios peligrosos.

Sin embargo, los rodillos se operan con controles remotos, lo que en el pasado causó cierta preocupación. ¿Qué pasaría si el operador perdiera de vista una máquina? ¿Y qué pasaría si la máquina se moviera tan lejos que el operador no pudiera controlarla o incluso apagarla en caso de emergencia?

Ammann abordó estas preocupaciones con un avanzado sistema de control remoto por infrarrojos (IR). Un señal infrarrojo constante conecta al operador con el rodillo compactador. Si se interrumpe el señal, el sistema inteligente sabe que se cortó la conexión visual y detiene la máquina.

La máquina también se detiene si se ha movido más de 20 metros más allá del operador o si se acerca demasiado al operador.

Es la seguridad y tranquilidad de quienes trabajan en el lugar de trabajo lo que hace que su desarrollo sea el más gratificante.

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A veces, un avance tecnológico no solo resuelve un problema específico, sino que también produce mejoras en muchos frentes. Ese fue el caso con la introducción del quemador de aserrín de madera en algunas plantas mezcladoras de asfalto de Ammann.

El quemador transformó el aserrín de madera, un material disponible de fuentes locales, en un combustible renovable: un beneficio clave en cualquier industria, lo que incluye a la producción de asfalto.

Convertir el aserrín de madera en combustible fue solo el comienzo. Lo que hizo al quemador de aserrín de madera aún más notable fue su neutralidad de carbono. El dióxido de carbono que se libera al quemar madera (aproximadamente 1900 gramos de CO2 por cada 1000 gramos de madera quemada) se compensa con el hecho de que el árbol consumió esta cantidad de dióxido de carbono durante su vida útil. Por lo tanto, esta parte de las emisiones es neutral en carbono. El objetivo de la neutralidad de carbono es para minimizar el impacto en el medio ambiente al reducir el nivel de gases de efecto invernadero en la atmósfera.

El quemador demostró su eficacia y se utiliza en varias plantas mezcladoras de asfalto de Ammann. También puede ser reequipado en plantas existentes.

En algunos casos, el combustible renovable y neutral en carbono se utiliza para transformar el asfalto reciclado en una nueva mezcla, lo que proporciona una gran cantidad de beneficios ecológicos adicionales.

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El poder de compactación es algo bueno. Es lo que aumenta las densidades de suelo y asfalto, lo que aumenta la resistencia de carga.

Aun así, al final de un turno largo, los operadores que experimentan los efectos vibratorios de la fuerza de compactación de la máquina pueden tener dificultades para apreciar su fuerza.

Al menos ese solía ser el caso. Ammann, sin embargo, cambió eso con el lanzamiento de la nueva línea de compactadoras de placa vibratoria reversible APR.

Las placas proporcionan una gran capacidad de compactación y productividad, pero la verdadera innovación detrás de la máquina es su bajo nivel de vibración en el brazo-mano (HAV). Un montaje especial para el mango guía es clave para el HAV reducido. El montaje nuevo aísla la vibración y evita que llegue al operario, lo que mejora de forma significativa la comodidad y la seguridad.

Los niveles de HAV en las nuevas placas están por debajo del límite de 2,5 m/s2. Para promocionar algo de perspectiva, los niveles de HAV son tan bajos que no es necesario registrar las horas del operario, inclusive en los países con regulaciones más restrictivas.

Los operadores en los lugares de trabajo son rápidos para elogiar la reducción de la vibración. Dicen que hace una diferencia sustancial que se nota desde el momento en que comienzan a operar la máquina.

Es lo mejor de ambos mundos. La potencia de compactación sigue ahí, ayudando a los operadores a seguir siendo productivos. Pero la reducción líder en la industria en los niveles de HAV hace que los días de los operadores no solo sean productivos, sino también agradables.

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Las compactadoras de placa vibratoria son herramientas de compactación ideales para aplicaciones pequeñas y medianas. Pero muchos tienden a saltar y aterrizar con su peso, y un borde de la placa, apuntando hacia abajo. Esto hace que la máquina se hunda en la superficie, lo que hace que sea más probable que se atasque y que al menos sea difícil de controlar para el operador. Esto es especialmente preocupante en las compactadoras de placa más pesadas con una fuerza de compactación significativa.

Ammann casi eliminó este salto contraproducente en 1998 con la introducción del sistema de excitación de triple eje en las compactadoras de placas vibratorias hidrostáticas de 360-780 kg.

Antes, las compactadoras de placas tenían dos ejes vibratorios que giraban para impulsar la fuerza de compactación en el suelo. ¿El problema? La misma fuerza que empujaba las placas hacia abajo también hacía que la máquina saliera del suelo en la segunda mitad de su rotación. El resultado fue ese salto inoportuno.

El uso de un tercer eje elimina ese salto. El eje proporciona vibración adicional, sin duda un beneficio, pero su principal función es llevar el equilibrio a la máquina.

El tercer eje, ubicado en el centro del sistema, equilibra los otros ejes. Todavía hay un movimiento hacia arriba y abajo, pero es mucho más suave, lo que mantiene la placa en una posición horizontal e impide que su borde penetre en los materiales. Esto es particularmente importante cuando se trabaja con materiales húmedos o sueltos, donde las placas convencionales tienden a penetrar el suelo.

El sistema de triple eje proporcionó otro beneficio significativo: el movimiento constante también hace que las máquinas sean excepcionales escaladoras.

El sistema protegido por patente sigue siendo una ventaja única de las placas APH de Ammann hoy en día, ya que les brinda la potencia y el control adicionales por los que son conocidos en el mercado.

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Algunos clientes necesitan “cambiar rápido” de sitio. La serie de plantas mezcladoras CBT de hormigón optimizadas para transporte permite llevar a las plantas donde sea necesario, de manera confiable y rentable.

En última instancia, la serie CBT ofrece beneficios económicos a los clientes. Los costos de armado, desarmado y flete se reducen mediante la combinación de las ventajas de un sistema compacto con las de un concepto de transporte en contenedor.

La unidad básica se transporta en tres contenedores: dos contenedores de parte superior abierta de 40′ y un contenedor plano de 40′, que cumplen con las normas internacionales de transporte. Los costos de transporte son bajos, en especial en el extranjero, aunque los datos específicos dependen del destino. Gracias al transporte internacional sencillo, la serie CBT ofrece una planta de hormigón premezclado disponible para todo el mundo.

La serie CBT 105 – 150 TB de Elba también se caracteriza por su diseño modular. Como resultado, las plantas se pueden poner en marcha de manera rápida y económica. Gracias a la alta calidad de todos los componentes, CBT es una planta mezcladora de hormigón de primer nivel.

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En 2013, decidimos ofrecer mayor eficiencia a nuestros clientes mediante el diseño de una plataforma común para todas las plantas mezcladoras permanentes de hormigón. El concepto de diseño creado recientemente abarca a las plantas de casi todos los tamaños y está disponible en las versiones de elevador o cinta transportadora.

Se podrán instalar nueve tamaños diferentes de mezcladoras para las plantas mezcladoras de hormigón CBS de Ammann Elba dentro del concepto de diseño. Esto significa que la nueva mezcladora se podrá integrar fácilmente al sistema existente sin necesidad de adquirir una nueva planta.

La serie CBS de plantas mezcladoras permanentes de hormigón ofrece un amplio espectro de aplicación mediante el sistema modular y el diseño galvanizado. Las plantas, además, ofrecen plataformas opcionales cómodas y con ancho adicional previamente instaladas y armadas. El cliente podrá elegir entre la instalación sobre un cimiento de hormigón o un marco de acero.